Hace unas semanas ya nos hicimos eco de la instalación den Vigo de las nuevas agencias de la Administración del Estado que se están creando en Galicia. Primero fue la Agencia Virtual de Hacienda, que en todas las Comunidades se instaló donde residía la sede regional de la Agencia Tributaria, siendo la única excepción la de Galicia que en lugar de localizarse en La Coruña se llevó a Vigo. Los propios responsables declararon a los medios que lo normal hubiera sido que estuviera en A Coruña pero en este caso lo hicieron para descentralizar los servicios y el empleo. Curiosa razón.¿ por qué no hicieron los mismo en otras Comunidades?
También estos días se dio a conocer la creación en Vigo de la Agencia Regional de Muface, también virtual, y a ella se suma -como ya en su momento anticipamos—el anuncio del alcalde vigués de la instalación en Vigo de la gerencia regional de Adif- ahora en Coruña- debido a que la nueva estación intermodal de Vigo es el mayor centro ferroviario de Galicia. Y seguro que se irán más.
La realidad es que, más allá de las justificaciones aludidas- todo esto obedece a un plan de Abel Caballero que pretende corregir lo que para el es un desequilibrio, ya que todas las administraciones de rango regional están en Santiago ( la autonómica) o en Coruña ( la judicial y la del Estado) . Incluso cuando se refiere a la nueva Ciudad de la Justicia, que tan magníficamente rehabilitó la Xunta, la denomina Ciudad de la Justicia de Galicia. No hay ninguna razón para ello, porque el Tribunal Superior de Xusticia está aquí, pero con estos precedentes todo puede esperarse. El caso es que la tendencia esta clara. La presión y la influencia política del alcalde está llevando la nueva administración a su ciudad, en contra de lo que se hace en las demás Comunidades, donde siempre se instala en la sede administrativa del Estado donde se ubica la Delegación del Gobierno.
Con el anuncio del presidente del Gobierno sobre la descentralización de la Administración del Estado, no sería extraño que pronto nos enterásemos de que un importante centro administrativo nacional se instala en Vigo. En principio no habría nada que objetar, salvo que esa idea surgió para reequilibrar el territorio a favor de la llamada España vaciada, dado que un centro administrativo nacional lleva consigo un importante impulso en el empleo y en la actividad de las ciudades donde se asiente. Lógicamente en el caso de Vigo esa no es la razón, y no cabe duda que se está generando un agravio comparativo a nuestra ciudad en comparación con lo que se hace en las otras Comunidades Autónomas.
En esto como en otros temas la ciudad esta indefensa, primero porque todo el aparato mediático regional juega a favor de Vigo, por distintos intereses en cada caso, y porque en Coruña no hay peso político para inclinar las decisiones del Estado a favor de nuestra ciudad.