En apenas unas semanas la prensa destacó algunas inversiones del Estado en las principales ciudades gallegas. Primero fue la aprobación del proyecto y licitación del llamado enlace orbital, una costosa obra para enlazar los polígonos, la autopista y la autovía a Lavacolla. Una obra necesaria.
Hoy mismo la prensa de Vigo anuncia que el Estado aprueba invertir 21 millones para el acceso a la intermodal.
En medio, el mismo Estado anuncia una vez más el retraso del dragado y regeneración de la ría de O Burgo, a pesar de tener el dinero consignado y con plazo fijo. Se alude a desencuentros burocráticos ¿no pueden sentarse y hablar?
Y qué decir del retraso de última hora en la obra de la intermodal, y de la paralización de Alfonso Molina. Y aun podríamos añadir el retraso del tren a Langosteira frente a las consignaciones para terminar el enlace del puerto ferrolano.
Cuando Inés Rey accedió a la alcaldía y Javier Losada era delegado del gobierno, muchos coruñeses esperábamos que este tándem iba a proporcionar una mayor acción inversora del Estado para paliar el retraso de las obras publicas en la ciudad. De momento, nos equivocamos. Inés no tiene la culpa ¿Qué pasa?
Menos mal que la Xunta de Galicia esta haciendo bien sus deberes, porque sin ella la inversión y la mejora de los servicios sería una vez más una entelequia. Y no olvidemos que en tiempos de crisis la inversión pública es más necesaria que nunca.
La lista de obras pendientes sigue siendo demasiado larga debido a los años de incumplimiento: vial 18, puente del pasaje, nacional sexta, cuarta ronda, Alfonso Molina, tren a Langosteira, estación intermodal… Claro que algunas veces los alcaldes ponen palos en las ruedas, como ocurre con el vial 18, pero aún así…
Y llevamos años así. Queda solo una esperanza: que se apruebe le presupuestó general y en él se incluyan algunas de estas inversiones. Con todo, se ponen demasiadas pegas de última hora para justificar paralizaciones injustificables: intermodal, ría de O Burgo, tren a Langosteira, puente pasaje, vial 18… Algo está pasando, algo no va bien.