Interesante artículo centrado en las diferencias delimitaciones territoriales, y sus consecuencias en la ciudad.
La Comarca de A Coruña es una parte de la histórica comarca de As Mariñas, que-como es bien sabido se dividía entre la de los Condes y las de los Frailes, haciendo alusión a los Condes de Andrade- con sede en Betanzos y Pontedeume- y a las tierras dependientes del monasterio de Sobrado. Por eso cuando hice el mapa comarcal no le puse de nombre la denominación histórica mencionada, pero también porque la ciudad de A Coruña no era de unos ni de otros: era una ciudad del rey. Desde entonces han pasado muchos años y la organización funcional del territorio es muy diferente.
Del mismo modo que el municipio coruñés se ha quedado pequeño y apenas da cobijo al núcleo urbano, así le pasa a la comarca. Con todo, no olvidemos que aún así la ciudad mayor de Galicia es A Coruña como consta en el Nomenclátor de Población, mientras que Vigo es el municipio más poblado, pero no la ciudad mayor. Y más seria si los límites coincidieran con el continuo urbano edificado, según el cual ya no solo somos la ciudad mayor de Galicia sino que somos, después de Bilbao, la mayor del Norte-Noroeste de España. Cosas de las estadísticas y los limites administrativo obsoletos.
En consecuencia tanto el municipio como la comarca se nos han quedado pequeños. Y todo gracias al importante crecimiento económico y demográfico del área metropolitana, donde se da otra curiosa paradoja estadística. Cuando se hacen estudios de población basados en el crecimiento vegetativo, como suele hacer el IGE (Instituto Gallego de Estadística) nuestra ciudad y comarca queda siempre en la sombra, ya que el crecimiento se concentra en las áreas con más población joven del sur de Galicia y de Santiago. Pero, después, cuando lo que se mide es la el crecimiento de la población residente el entorno coruñés es el área con mayor crecimiento demográfico de Galicia. La causa es que nuestro principal factor de crecimiento población es la inmigración, atraída por las oportunidades de nuestra área metropolitana.
Queda un tercer punto: los límites de la actual área metropolitana. Como siempre depende de los criterios utilizados. Por ejemplo en Estados Unidos tiene en cuenta los espacios de segunda residencia de la población urbana, las áreas de abastecimiento diario de alimentos agrícolas y ganaderos, y los desplazamientos al trabajo en la industria y en los servicios. En Francia se centran más en el espacio edificado y en los desplazamientos al trabajo, mientras que en Gran Bretaña los criterios funcionales del área de mercado directo son más relevantes. En Alemania, más pragmáticos, diferencian entre área urbana, áreas metropolitanas y región metropolitana. Pues bien haciendo una sintiese podríamos afirmar que la actual área metropolitana de A Coruña está formada, con criterios funcionales, por las siguientes comarcas: A Coruña, Bergantiños y Betanzos, además de algunos municipios de la fragmentada comarca de Ordes, principalmente Cerceda. Incluso la Comarca del Eume podría añadirse pero ya entraríamos en la región urbana o metropolitana Coruña-Ferrol, que es otro tema. Esos límites vienen avalados por los indicadores de todo tipo e incluso por el transporte metropolitano y por la ampliación solicitada para la Reserva de Biosfera, por eso ya es una realidad consolidada.
Dada la argumentación anterior, hay un asunto estadístico difícil de entender. La Xunta de Galicia, para muchas delimitaciones, y principalmente para los datos de empleo, siempre separa la comarca de Bergantiños del área de A Coruña. Pero la cosa no termina ahí, sino que en algunas publicaciones, entre ellas un importante diario, se incluye en la Terras de Santiago. Desconozco cual fue la razón de esta anomalía, pero ya va siendo hora que cuando hablemos de los datos del área metropolitana incluyamos también la comarca del Anllóns. Tal vez lo hayan hecho para enmascarar los datos en empleo de A Costa da Morte con las cifras positivas de Carballo. Tal vez haya sido otra la razón, pero no es casualidad. Contaré una anécdota al respeto. Cuando revisé y redacté el capítulo del Sistema Urbano de la Directrices de Ordenación del Territorio de Galicia, entre otros añadidos insistí en la prolongación del eje industrial Coruña-Arteixo (ese era el texto inicial) y le añadía Coruña-Arteixo-Carballo. Pues bien, dos o tres veces, ya no recuerdo bien, me lo devolvían tachando lo de Carballo. Por lo tanto, no es una ocurrencia, sino que es una decisión con una clara intencionalidad. Pero no estaría de más que cundo se presenten los datos comparados, los que así lo hagan tengan en cuenta la realidad del territorio, es decir que el actual área metropolitana incluye al menos a la tres comarcas de Bergantiños-A Coruña-Betanzos. ¿Hay algo más curioso que poner Laracha con Caión, y Carballo con Razo-Baldaio en las Terras de Santiago? A pesar de tal evidencia, volvemos a encontrarnos con que la delimitación del plan de infraestructuras verdes del área metropolitana, promovida por la conselleira de la cual es titular la candidata a la alcaldía coruñesa por el PP, vuelve a excluir la comarca de Bergantiños y a cambio añade la del Eume.
Y para terminar, un último apunte. ¿Si esta es el área metropolitana por qué en la actual comisión no están más que los municipios de la comarca de A Coruña? Porque el concepto que se asume es el de una mancomunidad más que una organización metropolitana. Y que conste que no estaría mal, es más yo apoyo esa decisión, es decir que estaría muy bien diferenciar entre una mancomunidad metropolitana para la prestación de los servicios públicos conjuntos de los nueve municipios que forman la aglomeración coruñesa, y un área metropolitana para otros fines. La Reserva de la Biosfera ampliada será la primera delimitación que coincida con la realidad actual del territorio. Eso ya es importante. Una vez más el carácter innovador de este organismo se pone de manifiesto. Por ahí debería ir el nuevo discurso metropolitano.